En el caso de las empresas, el renting se ha convertido en una opción muy atractiva para adquirir vehículos, equipos informáticos, maquinaria y otros activos necesarios para su funcionamiento. En lugar de realizar una compra directa, la empresa opta por el renting y paga una cuota mensual fija durante un plazo determinado. Esto permite a las empresas mantener su liquidez y destinar sus recursos a otras áreas de inversión o gastos operativos.
Disfruta de los servicios del comprador sin necesidad de realizar el desembolso inicial de la compra.
La compra puede suponer una fuerte inversión inicial para la empresa y por tanto puede suponer la descapitalización de la misma. Con el renting no tendrás que hacer fuertes inversiones iniciales y podrás utilizar ese capital para otros fines como el crecimiento.
Una de las principales ventajas del renting es que incluye una serie de servicios adicionales. Por lo general, el contrato de renting contempla el mantenimiento y la reparación de los bienes, así como la sustitución de los mismos en caso de avería o obsolescencia. Esto libera a las empresas de la responsabilidad y los costos asociados a la gestión y mantenimiento de los activos.
Los términos como renting o leasing están ganando popularidad en el mundo empresarial pero aun pueden resultar algo confusos para el empresario. Desde afinanzas estaremos encantados de resolver tus dudas sobre estas operaciones y sus beneficios
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